Introducción
El
liderazgo radica en realizar grandes emprendimientos, sin embargo pocos
entendemos cómo convertirnos en líderes o cómo hacer que otros lo logren. La
Compañía de Jesús fue la primera empresa que formó a sus buenos líderes y,
durante ese proceso, construyó una de las compañías más exitosas del mundo. Los
jesuitas han sido una fuente de innovación y de descubrimiento. En el libro,
Lowney, analiza los principios del liderazgo que han guiado durante casi cinco
siglos a la Compañía en sus diversas actividades. El perpetuo éxito de los
jesuitas descansa sobre cuatro pilares esenciales de su forma de liderar:
autoconocimiento, creatividad, amor y heroísmo; al incorporar estos principios
a su vida diaria, los jesuitas construyeron una organización que maneja una red
internacional sumamente eficaz de comercio, educación, trabajo misionero y
erudición; por otro lado acompañar a las personas en su capacidad de dirigir y
liderar es una importante y difícil tarea. Hoy en día los jesuitas aportan una
de las mejores tradiciones, con un excelente presente y mejor futuro: un
liderazgo entendido desde el servicio, que contempla a la persona desde todas
sus dimensiones (cognitiva, relacional, espiritual) y que aporta visión,
motivación y valores.
El liderazgo al estilo de los jesuitas
El libro está
dividido en dos grandes partes. En la primera establece el modelo teórico de
liderazgo diseñado e implementado por los jesuitas. En la segunda se acerca a
esa implementación a partir del desarrollo histórico de la Compañía de Jesús y
de relatar la vida de algunos jesuitas paradigmáticos que vivieron a plenitud
su liderazgo.
1Los fundamentos del liderazgo al estilo jesuita
En poco más de una generación, la compañía que fundaron en 1540 diez jesuitas sin capital, ni plan de
negocio llegaron a ser la más influyente del mundo, como confidentes de
monarcas europeos,
del emperador Ming de la China, del Shogun japonés, del emperador mongol de la
india, los jesuitas podían jactarse de tener
relaciones que no igualaban
ninguna entidad comercial ni religiosa ni oficial. Pero movidos por una energía
infatigable, no estaban tan a gusto en las cortes imperiales como a campo
raso probando nuevas fronteras. Aun
cuando sus viajes los llevaron a los últimos rincones de mundo entonces conocidos,
invariablemente exploraban toda frontera para averiguar que había más allá (Lowney, 2004) .
1Pilares del éxito.
De acuerdo al autor
el liderazgo creado por los jesuitas desde su fundación, hace 450 años, se basa
en cuatro principios, que fundamenta a partir de documentos, de prácticas, y
del estilo de formación de los jesuitas. Estos son: i) Conocimiento de sí mismo.
Saber reconocer muy bien cuáles son las fortalezas, debilidades y valores de
uno mismo. Tener un claro conocimiento del mundo y hacia dónde se quiere ir.
Las técnicas jesuitas de autoconocimiento (Oración, Ejercicios, Examen…),
permiten acomodarse al cambio porque infunden el hábito del continuo
aprendizaje y de la valoración diaria de la acción. ii) Ingenio. Siempre innovar y al mismo tiempo adaptarse a las
circunstancias de un mundo cambiante. Explorar nuevas posibilidades e ideas.
Aprender de las otras culturas y darles su valor. No estar a la defensiva.
Fundarse en lo que se cree, que no es negociable, pero saber ser indiferentes.
Eso permite siempre adaptarse sin tener miedo. iii) Amor. Querer a los demás y tratarlos a partir de esa
realidad. Siempre mantener una actitud positiva. Ganar a la gente por el amor y
no el temor. Los líderes tienen confianza en sí mismos y la proyectan a los
demás. Saben sus posibilidades y sus límites, reconocen e impulsan los que
tienen los otros, respetan su libertad e iniciativa, crean ambientes de
creatividad y también de lealtad, afecto, colaboración y apoyo mutuo. iv) Heroísmo: Despertar en uno mismo, y en los demás, grandes deseos.
Fortalecerse a sí mismo, y en los demás, aspiraciones heroicas. Los líderes
imaginan grandes futuros e impulsan a alcanzarlos. No esperan el futuro sino
que lo construyen. Los líderes sacan provecho de lo que tienen, en lugar de
esperar que las cosas se acomoden.
De otra manera se
podría plantear, como lo propone el autor, que en la formación de los jesuitas
como líderes está siempre presente: i) Conocer y entender sus fortalezas, sus
debilidades, sus valores y tener
una visión de mundo. ii) Innovar confiadamente y adaptarse a un mundo
cambiante. iii) Tratar al prójimo con amor y con una actitud positiva. iv) Fortalecerse
a sí mismos y a los demás con aspiraciones heroicas
Lo que hacen los líderes
Lo que hacen los líderes
El profesor John
Kotter, de la escuela de negocios de Harvard y desde hace más de 30 años
destacado comentador de las prácticas
administrativas de las compañías, ofrece un buen resumen de lo que creemos que
son los deberes de un líder: i) Trazar el rumbo: exponer una visión de futuro(a
veces un futuro lejano) y las estrategias para producir los cambios necesarios
para realizar dicha visión. ii) Alinear a la gente cuya cooperación se
requiere: comunicar el rumbo verbalmente y con hechos, de manera que influya en
la creación de equipos y coaliciones que entiendan la visión y las estrategias
y acepten su validez. iii) Motivar e inspirar: infundir vigor a las personas
con el fin de vencer los obstáculos políticos , burocráticos y económicos que
se oponen al cambio, y satisfacer así necesidades humanas básicas que a menudo
permanecen insatisfechas. iv) En gran parte como como resultado de estas tres
primeras funciones, producir cambios, muchas veces dramáticos.
En otras palabras,
el líder determina a donde necesitamos ir, nos indica el camino acertado, nos
convence de que es precisó ir allá y nos conduce a través de los obstáculos que
nos separan de la tierra prometida.
1El aporte de los jesuitas al
conocimiento sobre el liderazgo
¿Qué pueden aportar
a nuestro conocimiento del liderazgo unos cuantos sacerdotes del siglo XVI?, no
nos dicen mucho que no sepamos ya acerca de que es lo que hacen los líderes. Tampoco
nos enseñan nada sobre lo que los líderes realizan. Pero si tienen mucho que
decirnos sobre quiénes son los lideres, como viven y como llegaron a ser
líderes.
Los jesuitas nos muestran un modelo de
liderazgo que va contra la corriente de la mayoría de los modelos contemporáneos.
Rechazan los enfoques acomodaticios que equiparon el liderazgo con la simple
técnica y las tácticas. Encuentran oportunidades de liderazgo no solo en el trabajo sino también en las
actividades ordinarias de la vida. Los jesuitas enfocan el liderazgo a través de un prisma muy distinto, y así
refractado el liderazgo aparece bajo una luz distinta. Cuatro diferencias se
destacan: i) Todos somos líderes y dirigimos todo el tiempo, bien o mal. Sin
embargo, el liderazgo lo define no sólo la magnitud de la oportunidad sino
también la calidad de la respuesta. Uno no puede controlar las circunstancias,
pro sí como responde a ellas. ii) El liderazgo nace desde adentro. Determina
quién soy, así como qué hago. El medio más eficaz de liderazgo con el que
cuenta el individuo es el conocimiento de sí mismo. La mayor fortaleza de un
líder es su visión personal. iii) El liderazgo no es un acto. Sino una
manera de vivir y un modo de proceder en la vida. iv) Nunca se termina la
tarea de hacerme líder. Es un proceso continuo. El ambiente externo evoluciona
y las circunstancias personales cambian, lo mismo que las prioridades
personales.
1Algunos episodios notables de la historia de la Compañía de Jesús, que la hacen
distinta a otras instituciones
Una compañía sin plan
Se inicia con sólo
diez hombres, que tenían como único propósito ayudar a los demás. Era la única
claridad. No había un escrito, ni una estrategia o un producto a presentar. Era
una estructura de hombres de distintas nacionalidades, origen económico y
edades. La diferencia entre el más joven y el mayor era de 24 años. El líder
era un hombre de 38 años, para las expectativas de vida del siglo XVI, estaba
ya en el ocaso de su vida. No tenía realizaciones relevantes y sí un historial
que podría ser considerado problemático (Dificultades con la inquisición, había
estado preso, no tenía dinero, padecía de una cojera producto de la guerra…)
Los Ejercicios Espirituales
El único texto con
el que contaban era los Ejercicios Espirituales de 30 días redactados por el
fundador. Quien los hacía, adquiría conciencia profunda de sí mismo y un método
permanente, para siempre seguir haciéndolo. Le permitía también tener una
visión del mundo y qué quería hacer con su vida.
Rigurosa selección de sus miembros
El fundador no
aceptaba gente en la Compañía de Jesús con excesiva liberalidad. El proceso de
selección era muy estricto. Eso, en lugar de reducir las solicitudes, las
aumentó y siempre venían de aspirantes muy cualificados.
Movilidad permanente
A diferencia de
otras órdenes religiosas que hacían voto de estabilidad y permanecerían en un
monasterio, los jesuitas se comprometían a moverse de un lugar a otro. La
filosofía de la nueva orden era que “todo el mundo es nuestra casa”.
Una nueva manera de orar
El fundador, San
Ignacio de Loyola, revoluciona la manera de orar y relacionarse con Dios. En
esa época los religiosos en sus monasterios dedicaban muchas horas del día a la
oración. El fundador estableció que los jesuitas sólo dedicaran 15 minutos a
esa actividad. Que el tiempo se diera al trabajo con la gente que se quería
ayudar y que en éste se hiciera oración.
Crearon 30 universidades en diez años
Ninguno de los
fundadores tenía experiencia en la administración de centros de estudio.
Los diez jesuitas iniciales tenían arrojo para actuar en el mundo en razón de
lo que pensaban debían hacer, para ayudar a los demás. Eso remplazó sus
carencias técnicas.
Las Reducciones del Paraguay
Los jesuitas
establecen un modelo misional original que implicó la formación de ejércitos,
para que los indígenas pudieran resistir y defenderse de los esclavizadores.
La supresión y el volver a
empezar
El papa por presión
de gobiernos civiles suprimió a la Compañía de Jesús. La supresión duró 40
años. Se reagrupan los sobrevivientes y vuelven a renacer.
1Modelos de liderazgo
El autor hace un
análisis de cómo algunos jesuitas vivieron los cuatro principios del liderazgo.
Los que elige no dirigieron gente, pero fueron líderes porque su vida no se
amolda a ideas convencionales y plantea interrogantes sobre lo que significa
ser líder.
Benedetto de Goes
El padre Goes tenía
como misión buscar una ruta terrestre entre la India y China, y descubrir la
gran Catay. Sin embargo, nunca encontró el reino de Catay y tampoco la tan
deseada vía corta entre la India y la China. La historia de este jesuita define
el liderazgo al mostrar cómo no es necesario lograr un triunfo personal para
tener éxito como líder; hay ocasiones en que éste toma la forma de un aporte a
los logros del grupo.
Matteo Ricci
El padre Ricci
adoptó la cultura, los valores y las normas de los confucionistas. Como
cartógrafo elaboró, para los gobernantes chinos, un mapamundi donde China era
el centro y esto permitió que más adelante se dejara entrar a los jesuitas a
ese país.
Christopher Clavius
El padre Clavius
trabajó como profesor universitario durante 48 años. Nunca pensó que la
astronomía sería la clave del éxito de los jesuitas en la China. Él apoyó a
Galileo Galilei para conseguir su primer puesto docente y lo hizo sabiendo que
pensaban diferente. Clavius defendía el sistema tolemaico según el cual todo
gira alrededor de la Tierra, y Galileo que el centro del sistema planetario era
el sol. El padre respaldó los descubrimientos de Galileo a pesar de estar en
contra de la Iglesia. Esto es un claro ejemplo de su honradez intelectual y su
devoción a la verdad. Ninguno de estos jesuitas nunca dirigió a más de unas
pocas personas, pero supieron dirigirse a sí mismos. A partir de estos tres
modelos se pueden deducir algunas cualidades del liderazgo como lo propone al
autor: i) Los líderes están siempre enseñando y aprendiendo. ii) Forman hombres
y mujeres brillantes y eminentes. iii) Se vigorizan con la misma ambición de
sus metas heroicas. iv) Son innovadores y atacan los problemas de manera
que sus antecedentes no imaginaron jamás. v) Se dedican a la excelencia. vi) Permanecen
abiertos a las ideas nuevas aún en la vejez. vii) Honran la verdad sin egoísmo.
viii) Influyen en los demás con el ejemplo, sus ideas y sus enseñanzas.
A medida que el
mundo se hace más complejo, queda más claro que sólo quienes tienen una
capacidad arraigada de aprendizaje continuo tienen posibilidad de sobrevivir en
este cambio. En este modelo los líderes
empresariales se caracterizan por: i) Están siempre enseñando y
aprendiendo. ii) Forman hombres y mujeres brillantes. iii) Se vigorizan con la
ambición de sus metas heroicas. iv) Son innovadores y atacan los problemas de
manera que nunca antes lo hizo. v) Se dedican a la excelencia. vi) Están
siempre abiertos a las nuevas ideas. vii) Honran la verdad. viii) No son
egoístas. ix) Influyen en los demás con su ejemplo, ideas y enseñanzas.
Conclusiones
Las
claves del liderazgo jesuita son cuatro y cualquiera puede aplicarlo, el
autoconocimiento, por medio del cual hay que conocer las propias debilidades,
fortalezas, valores y cosmovisión, la creatividad con lo cual el mundo cambia
todo el tiempo y los líderes efectivos saben adaptarse, el heroísmo, que dice
que hay que motivarnos con la pasión para ser sobresalientes, y con objetivos
que sean mayores que el propio ego, el amor, con lo que debemos tratar a los
demás de manera que respete su dignidad y libere su potencial humano; a menudo asociamos liderazgo con una posición
jerárquica, pero basada en los valores jesuitas, es exactamente la opuesta, con
lo que todo el mundo está liderando en cada momento como resultado del impacto que
tienen las propias acciones cada día, y basarse en este modelo es muy útil para
hacerlo bien a cualquier escala.
Sabemos que el liderazgo consiste en realizar grandes emprendimientos pero pocos entendemos cómo convertirnos en líderes o cómo hacer que otros lo logren. La Compañía de Jesús fue la primera empresa que formó a sus propios líderes y, durante ese proceso, construyó una de las compañías más exitosas del mundo.Fundada en 1540 por diez hombres sin capital y sin ningún plan de negocio, los jesuitas han sido desde entonces una fuente de innovación y de descubrimiento. En este libro, Lowney, ex jesuita y ejecutivo de J. P. Morgan, analiza los principios del liderazgo que han guiado durante casi cinco siglos a la Compañía en sus diversas actividades. El perdurable éxito de los jesuitas descansa sobre cuatro pilares esenciales de su forma de liderar: autoconocimiento, creatividad, amor y heroísmo.Al incorporar estos principios a su vida diaria, los jesuitas construyeron una organización que maneja una red internacional sumamente eficaz de comercio, educación, trabajo misionero y erudición. Acompañar a las personas en su capacidad de dirigir y liderar es una importante y difícil tarea.
ResponderEliminarbuen aporte!
ResponderEliminargracias, Irvin royer realmente es un tema interesante !!
ResponderEliminarinteresante la información
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